En la segunda parte de esta trilogía, aprendimos cómo se comporta una instalación fotovoltaica que se diseña únicamente teniendo en cuenta parámetros geométricos y de accesibilidad para mantenimiento. Vemos presentado en la siguiente gráfica su comportamiento en cuanto a producción energética:

Imagen 1: Comparación de Consumo y Generación

Tabla 1: Consumo Mensual de Energía Antes de los Paneles

Las convenciones de la gráfica y la tabla son las siguientes:

El área naranja corresponde a la energía que todavía se consume de la red eléctrica.

El área azul corresponde a la energía que se deja de consumir de la red y se toma de la energía entregada por los paneles solares.

El área rosada es energía que la empresa no alcanza a consumir y debe exportar (vender) a la red eléctrica.

Con esto en mente, ahora queremos entender la regulación en Colombia para la compra, venta y permutación de excedentes de autogeneración, específicamente con Fuentes Renovables No Convencionales (FRNC). De esta manera, observaremos los tres casos diferenciales para auto generadores:

Autogeneración a Pequeña Escala Inferior a 100 kWac

Autogeneración a Pequeña Escala Superior a 100 kWac e inferior a 1.000 kWac.

Autogeneración a Gran Escala Superior a 1.000 kWac e inferior a 5.000 kWac

(Aquí es bueno un Link al Glosario donde lo describo mejor)

Como pudimos observar en el texto ‘Potencia de un Sistema Fotovoltaico (link)’, nuestro sistema de 128 kWp no alcanza a superar los 100 kW, por lo que podemos seleccionar un(os) inversor(es) que sume(n) 100 kWac, y registrar este proyecto como ‘Autogeneración a Pequeña Escala Inferior a 100 kWac’.

¿Por qué es beneficioso registrar este proyecto como inferior a 100 kW? Se explica a continuación:

Para proyectos inferiores a 100 kWac, la CREG tiene unas reglas especiales para los autogeneradores:

Los excedentes de energía que no superen el consumo que todavía tiene la bodega de la red, serán permutados con este consumo y por este volumen de energía sólo se deberá pagar el valor correspondiente a comercialización (C). Es decir, no se venderá a la red sino que se hará un ‘trueque’ de energía, donde el Autogenerador pagará un valor residual que no suele ser superior al 10%.

Cuando los excedentes superen el consumo de la red, el valor que no se alcance a permutar el autogenerador lo podrá vender a la red según el precio de bolsa vigente en el momento.

Revisemos con nuestro ejemplo cómo funciona este esquema:

Imagen 2: Gráfica de Consumo vs Generación con la Regulación Colombiana.

Imagen 2: Consumo Mensual de Energía Antes de los Paneles

Como podemos ver, entonces, bajo esta regulación, podemos ‘intercambiar’ con nuestro comercializador de energía los 3.000 kWh que consumimos en la noche cuando los paneles no pueden generar, por lo que maximizamos el ahorro, ya que bajo esta regulación nos ahorramos el consumo nocturno.

Adicionalmente, tenemos 4.900 kWh que son vendidos a nuestro comercializador de energía (así lo exige la regulación). Estos excedentes, sin embargo, se pagan al autogenerador al volátil precio de bolsa de la energía, lo que dificulta realizar un modelo económico certero y deja al cliente expuesto a un riesgo bursátil. Por lo tanto, es mejor diseñar un proyecto de paneles solares que no cuente con este tipo de excedentes, teniendo en cuenta que para un proyecto de ahorro no suele existir un gran apetito por el riesgo.

Por lo tanto, instalar 128 kWp en la cubierta de nuestro cliente no es tampoco el proyecto idóneo. Sin embargo, a raíz de este análisis sabemos que deberá ser un proyecto que no cuente con excedentes que se vendan a la red, sino únicamente los que se permuten con la red.

El sistema ideal, entonces, es uno que genere 10.000 kWh mes. Realizando nuestros cálculos, para la zona geográfica de nuestro proyecto, ese es un sistema de 80 kWp. Que se vería de la siguiente manera en nuestro diagrama de producción:

Imagen 3: Gráfica de Consumo vs Generación con 80 kWp.

Tabla 3: Consumo Mensual de Energía Antes de los Paneles

Como se observa en la tabla, los excedentes que no se permutan, se reducen idealmente a cero, optimizando al máximo el proyecto solar para las necesidades del cliente. Esto, teniendo en cuenta que se minimiza al máximo el riesgo y, utilizando la regulación, se cubre el 100% de su necesidad energética.

Por último, observemos cómo luce la cubierta. Queda muy claro que no es necesario llenar el 100% de la cubierta con paneles.

Imagen 4: Imagen del Proyecto Final.