¿Siempre va a bajar mi tarifa después de instalar paneles?

¿Siempre va a bajar mi tarifa después de instalar paneles?

Desde hace un par de años, cada tanto se encuentran en redes sociales siguientes noticias/historias de terror en Colombia:

“Ciudadano instala paneles solares y su factura de energía eléctrica se dobla”

Por lo general, la trama de ellas es la misma: un usuario residencial decide convertirse en autogenerador para disminuir el valor que paga por electricidad y termina con una factura de energía eléctrica mucho mayor a la que esperaba recibir después de instalar energía solar.

La razón detrás de este incremento era un denominador común, la penalización o cobro de la energía reactiva. Para quienes no somos ingenieros eléctricos, la energía reactiva es un concepto tan esquivo que debe ser explicado a través de una cerveza.

En términos simplificados, debemos saber que la energía eléctrica que consumimos en industrias y hogares tiene dos componentes: la que podemos utilizar para mover motores, encender computadores e iluminación (energía activa) y la que debe acompañar a la energía activa pero no tiene un uso práctico (reactiva). En otras palabras: la energía activa es la parte líquida de la cerveza que podemos consumir, y la reactiva es la espuma que inevitablemente la acompaña.

Por eficiencia energética, es ideal que la energía activa sea la máxima posible respecto a la reactiva, tal cuál como con la cerveza, a este balance entre ambas lo llamamos factor de potencia. Los Sistemas con Paneles Solares, al contar con Inversores (véase el Glosario) pueden entregar una cerveza casi perfecta: 98% de energía activa generalmente.

Lo que ocurre con los autogeneradores que mencionamos al principio, es que empiezan a consumir mucha energía activa de su arreglo de paneles solares, pero sus equipos o electrodomésticos siguen requiriendo de la energía reactiva (como aquellas personas que necesitan más espuma en su cerveza), y ella únicamente puede venir de la red eléctrica.

¿Cuál es el problema? Que la red eléctrica penaliza el consumo desbalanceado de energía reactiva, por lo que estos usuarios que sí redujeron su consumo energético, terminan pagando un monto mayor al que tenían antes de ser autogeneradores.

¿Cuál era la solución para esto? Naturalmente, la mejor idea no es desinstalar el Sistema Fotovoltaico que se tiene, pues son equipos que pueden funcionar entre 15-30 años y tienen un valor económico importante. Por lo general, se solucionaba implementando un banco de condensadores, cuya inversión es importante pero no al nivel del sistema fotovoltaico.

Sin embargo, la inversión en el banco de condensadores en general no se tenía pensada y podía terminar afectando los ahorros que el cliente preveía.

¿Cuál es la buena noticia? Que el 7 de junio de 2023, el Ministerio de Minas y Energía expidió el decreto 0929, mediante el cual estableció lo siguiente:

ARTÍCULO 4. Modifíquese el Artículo 2.2.3.2.4.9 Decreto 1073 de 2015, el cual quedará así:

PARÁGRAFO 2: Los usuarios que cuenten con sistemas de autogeneración a pequeña escala a partir de FNCER están exentos del cobro de energía reactiva.

Es decir, para todo usuario que desee implementar en sus instalaciones un Sistema Fotovoltaico (u otra fuente de autogeneración renovable) con potencia menor a 1 MWac quedará exento del cobro de energía, y no deberá preocuparse por la espuma de la cerveza que consuman sus equipos o en el costo extra que conlleva la instalación de un banco de condensadores.

En síntesis, respondiendo a la pregunta del título, ahora más que nunca es cierto que la factura de energía se reducirá después de la instalación de los paneles solares.